Temeridad contra Libertad

Donde hay una necesidad, nace un derecho.
Eva Duarte de Perón.

Qué fue lo que temió Mauricio Macri, elegido democráticamente por el pueblo de Argentina, para encarcelar a una diputada del Parlasur, en la primera de las acciones de su gobierno en 2016 contra los derechos de las mujeres y que luego se convertirían en la empuñadura de lanza contra los derechos de trabajadores y voces opositoras?. Sí, porque tras el encarcelamiento de Milagro Sala, llegó la caza de brujas contra militantes populares y Jujuy fue la prueba piloto con las detenciones y hostigamiento a compañerxs de la Tupac, las detenciones de Carlos Zannini, Amado Boudou y Julio Devido entre otrxs. Sin dudas, la cacería es contra un modelo político y social donde la prioridad sea la distribución de la riqueza. Y contra quien mejor lo representa, Cristina Fernández de Kirchner.

Es la primera vez que por elecciones populares llegan al poder los ricos, los terratenientes, los empresarios capitalistas, aquellos que se sirven del pueblo para usar como propio al Estado, los que jamás pierden porque entre bueyes, no hay cornadas. La temeridad de este gobierno de ajustadores seriales y conservadores de las más rancias aristocracias, es la organización de trabajadores y sectores populares, porque sin redes organizadas, es más sencilla la apropiación de las ganancias y recursos naturales del país.

La comunidad originaria liderada por Milagro fue usada como una fórmula de laboratorio. Tras la prisión de Milagro en condiciones inhumanas y a referentes de la Tupac, la tortura como práctica -desde el hostigamiento, persecución a familiares y torturas físicas, incluyendo la incitación al suicidio sobre algunas compañeras con intentos oportunamente denunciados – y la incautación de lo producido por las cooperativas de pueblos originarios, quedaba la destrucción del orden simbólico. Y así lo hicieron.

La estigmatización de Milagro como corrupta -remanido argumento- desde la producción de sentido de medios de comunicación con pauta estatal y negocios asociados con otros sectores de poder, es de fácil instalación y para volver atrás ese daño personal y social que provocan acusaciones de estas características, se hace faraónica la tarea de reparación.

Luego de la sentencia mediática de corrupción individual, llegó la “purga” comunitaria: despojar de las herramientas laborales a lxs trabajadores de las cooperativas y destruir Alto Comedero. Por que otro de los puntos en los cuales el conservadurismo goza, es trabajar sobre la meritocracia y la envidia. Por qué ciudadanos provenientes de sectores humildes tienen derecho a la movilidad social ascendente? Por qué pueden tener casas dignas, vehículos y pileta de natación como los clubes de grupos mejor posicionados? Por qué pueden pagar impuestos en vez de evadirlos? Por qué pueden reivindicar la historia de su pueblo?

Manos y dedos oscuros, uñas prolijas y cortas, en armonía con su cuerpo. Sostienen limones que abrazan el cuchillo para desangrarse una y otra vez hasta humedecer la carne. Luego, el aire y el calor, la cocerán naturalmente.

Como en un rito, esas manos moldean el relleno de empanadas mientras habla sin pausas; con la misma garra, moldean sueños y desafíos.

Historias ancestrales plagadas de luchas en el camino de la construcción libertaria.

“Milagro, la película”, un excelente documento realizado por Martin Adorno y Cynthia García, con gran calidad tanto por el relato audiovisual como la elección de testimonios de vida, cuenta con precisión la cotidianidad de la vida de las familias en Alto Comedero, desde la preparación de comidas a los juegos acuáticos de pibes y jóvenes; las escuelas y el valor de la educación; el lugar paritario de mujeres junto a varones en lo laboral y sus relaciones familiares. En síntesis, empoderamiento personal, organización social y relaciones humanas amorosas.

La empresa de la destrucción del poder del pueblo, no ahorra injusticias ni despojos ni dolores ni sangre. Dos días antes de cumplirse el tercer año de encarcelamiento de Milagro, con el reclamo por su libertad de organismos internacionales, de partidos políticos en Argentina y Latinoamérica, con severos cuestionamientos a la Justicia jujeña y al gobernador Gerardo Morales, avanzaron en nuevas causas con altas condenas contra la dirigente e integrantes de la Tupac. Con pruebas débiles y aún en etapa de apelación de la sentencia, la Justicia ordenó la detención de lxs acusadxs.

Este momento histórico nos interpela como militantes en unidad de acciones a favor de la justicia social y por nuestra memoria colectiva, nos exige la lectura política de situaciones similares en otras etapas de nuestra Nación. Cada vez que el Pueblo organizado caminó unido por derechos fundamentales y sobre todo, por libertad y equidad, los antipueblo no dudaron en unirse para doblegarnos. La duda nos es ajena.

Las fuerzas democráticas con mandato popular, exigimos la libertad a Milagro Sala y a todxs lxs presxs políticxs de nuestro país, la vigencia de las garantías constitucionales y de los legítimos procesos judiciales; la libertad de expresión y de trabajo.

Seamos libres, lo demás no importa nada.
José de San Martín

*Norma López es concejala de Rosario (FpV-PJ) y Secretaria de la Mujer del PJ de Santa Fe.