Maximiliano Rusconi, abogado del exministro de Planificación, aseguró en diálogo con #LaGarcía Radio que pedirán la nulidad de la denominada “Causa de los Cuadernos” por la “aplicación retroactiva” de la ley del Arrepentido. Según el defensor, “se está aplicando retroactivamente una ley penal, como es la ley del arrepentido, que fue sancionada en 2016 y como es una ley sustantiva que emanó del Parlamento Nacional, está prevista para casos posteriores a su sanción”. “Vamos a pedir la nulidad por la aplicación retroactiva de la ley penal”, informó.
Rusconi cargó contra el juez Claudio Bonadío, a quien acusó de realizar una “actuación preocupante” y de ser “un sujeto al que lo seduce mucho la oportunidad de extorsionar procesalmente”. “En esta causa no hay una investigación seria, no hay recolección de la prueba y se violan garantías permanentemente”, se quejó.
Para el letrado, la causa de los cuadernos “va a pasar a la historia, no por investigar la corrupción con eficacia, sino porque el juez decidió expresar todos sus fantasmas de autoritarismos y del no respeto al Estado de Derecho”.
En este sentido, aprovechó para rechazar las irregularidades en los allanamientos en los domicilios de la senadora Cristina Fernández de Kirchner y afirmó que “es indispensable la intervención del abogado defensor”: “Que el defensor no haya podido ingresar al domicilio de su defendida en el ámbito de un allanamiento no tiene antecedentes”, sostuvo.
Y cuestionó algunas opiniones favorables a la maniobra de Bonadío: “Normalmente algunos (abogados) que se denominan ‘constitucionalistas’ dicen que queda al arbitrio del Juez si invita o no al abogado defensor. “Una opinión similar emitió Gregorio Badeni y demuestra, con todo respeto, un nivel de ignorancia. Los constitucionalistas no deberían opinar de Derecho Penal”.
Consultado sobre la mentada figura del “arrepentido”, Rusconi opinó que “es un gran escándalo jurídico”: “Vale más lo que declara un testigo, que lo hace bajo juramento y no tiene ningún interés en el resultado del proceso, que lo que diga un co-imputado, que tiene derecho a mentir, puede no declarar y está interesado en llevar agua para su molino”, indicó.
“El arrepentido, que no tiene nada de arrepentido, es un sujeto co-imputado que encima está negociando su pena, intentando sacar a través de su declaración una ventaja personal. Con lo cual, el arrepentido debería ser una de las pruebas de menor valor y sin embargo está instalada como la gran prueba de la instrucción penal. La idea del arrepentido no tiene ningún valor en términos probatorios, pero además, el arrepentido como figura invita a sujetos como Bonadío a una actuación preocupante, porque son sujetos a los que los seduce mucho la oportunidad de extorsionar procesalmente”, enfatizó.
En tanto, Rusconi subrayó que “lo de Centeno todo es nulo”: “Que el arrepentido-colaborador sea el que quemó los cuadernos en una parrilla es gracioso. Centeno, además, reconoció que él estaba muy enojado con la persona que facilitó que el periodista tenga acceso a sus cuadernos, con lo cual está reconociendo que su voluntad es que esos cuadernos nunca salieran de su dominio. Entonces, si salieron de su dominio, hubo una violación de la intimidad. Si existen esos cuadernos, o las fotocopias de esos cuadernos, en el origen hay un delito. El fruto de ese delito no puede ser valorado. Eso es lo que se denomina ‘el fruto del árbol envenenado’”, explicó.
Rusconi dijo que “este caso no tiene destino de juicio oral, tiene destino de juicio político de los jueces y magistrados que han legitimado esto. Así debería ser en un país donde prima el Estado de Derecho”. “Nada de lo que haga Bonadío es explicable en términos judiciales. Con los desatinos que ha hecho, esto va a terminar en un fracaso rotundo”, agregó, al tiempo que se mostró pesimista respecto a las instancias de apelación: “No tengo mucha fe en lo que dictamine la Cámara Federal”, expresó.
Por otra parte, Rusconi desconoció las declaraciones del abogado Mariano Cúneo Libarona, que había dicho que su defendido, el empresario Sergio Taselli, era capaz de “mentir” e imputar personas con tal de alcanzar la libertad: “No sé exactamente lo que dijo Cúneo Libarona. Yo lo veía al principio como panelista de Intrusos, después apareció como abogado de uno de los imputados en la causa, no sé con qué suerte procesal”, ironizó.
Según Rusconi, el exministro Julio De Vido “hasta ahora es inocente sin ningún tipo de duda”: “No fue condenado en ninguna causa, no se encontró ni un ápice de incremento patrimonial. Yo estoy esperando que un juez me diga en qué día y a qué hora Julio De Vido cometió un ilícito, y la verdad que mis expectativas hasta ahora están insatisfechas. No me queda claro qué se le atribuye a De Vido en una infinidad de causas que tienen un contenido político que es dramático”, puntualizó.
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