Evo Morales regresó a Bolivia. Luego de once meses de exilio en nuestro país, Alberto Fernández lo despidió en la frontera con Bolivia, en la Quiaca. “Garantizamos que nuestro querido Evo Morales regrese a su patria. De la que nunca debió haber salido y nunca debió haber sido maltratado, como lo fue”, expresó Fernández.
En un breve acto, con emotivo mensaje, Alberto Fernández además agregó: “Es el deber de cada uno de nosotros ir en socorro de aquellos pueblos que se ven amenazados y lastimados por levantamientos como el que sufrió Evo y Bolivia un año atrás”, al recordar el golpe de Estado que forzó la renuncia del exmandatario.
“Estoy feliz de haberle tendido la mano a Evo, a Álvaro (García Linera, exvicepresidnete de Bolivia) y a los compañeros de Bolivia”, indicó el Presidente.
“El pueblo sabe, y del otro lado del puente hay miles de bolivianos que esperan abrazar a Evo y a Álvaro», completó el presidente de la Nación.
Por su parte, Evo Morales se mostró agradecido con Alberto Fernández y le dijo que le «salvó la vida»: “Quiero que sepan que especialmente Alberto Fernández me salvó la vida y eso nunca lo vamos a olvidar”. “No dudaba que iba a volver, pero no estaba seguro que iba a ser tan pronto. Gracias a la unidad del pueblo y al acompañamiento de autoridades de todo el mundo”, reiteró. Por último, Evo Morales expresó: “parte de mi vida queda en Argentina luego de estar once meses”.
El abrazo quedó inmortalizado entre Alberto Fernández y Evo Morales. El expresidente de Bolivia y cruza la frontera. Se emprende una caravana con miles de seguidores que lo acompañaran en su recorrida de más de 1.000 kilómetros hasta la zona cocalera de Cochabamba.