*Por Valeria di Croce para Agencia Cadena del Sur
A más de tres meses del derrame en Bandurria Sur las preguntas siguen sin respuestas.
El 19 de octubre de 2018 se produjo una fuga por una surgencia de hidrocarburos durante el proceso de extracción de una corona. El incidente afectó una extensa área en los alrededores del pozo Lcav-26. Desde la Legislatura provincial solicitaron informes y el gobierno de la provincia incumplió los plazos establecidos en la legislación para responder.
Según se supo por la información difundida de manera confusa por medios en base a declaraciones de funcionarios provinciales y de la empresa, el derrame cubrió 47 hectáreas en total entre la superficie alcanzada por el spray, las canaletas y las piletas. Durante 2015 y 2016 el total de áreas afectadas por incidentes de este tipo, alcanzó una superficie total de 31,51 hectáreas.
En el marco de la campaña para las internas partidarias del Movimiento Popular Neuquino (MPN) que sucedieron en noviembre del año pasado, el tema del derrame y los daños ambientales se metieron en la agenda.
El gobernador, Omar Gutiérrez, era uno de los candidatos en la interna del MPN y se jugaba las chances de ser nuevamente candidato por el partido. Jugó fuerte y anunció mediáticamente que el estado provincial “por falta de compromiso ambiental” suspendía la licencia de YPF en el yacimiento de Vaca Muerta donde ocurrió el derrame.
Omar Gutiérrez ganó las elecciones y es candidato por el oficialismo neuquino. El tema del derrame en Bandurria Sur desapareció de la agenda. Macri, hasta entonces un aliado estratégico del gobernador, se mostró cercano al intendente de la capital provincial, Horacio “Pechi” Quiroga, quien junto a David Schlereth (actualmente diputado nacional) son sus candidatos en Neuquén para las elecciones de 2019.
La relación entre el presidente y Gutiérrez ya no es la misma. Las diferencias por los subsidios y el Plan Gas marcan un momento de tensión entre Nación y la provincia. “Planteando los reclamos en defensa de los intereses neuquinos para profundizar la generación de empleo a partir del desarrollo de nuestro polo industrial”, escribió el gobernador en su cuenta de Twitter los primeros días de enero tras reunirse con Dujovne y Lopetegui.
La reunión de Gutiérrez con los funcionarios nacionales vino luego de un encuentro protocolar del titular del ejecutivo neuquino con el presidente Macri que se encontraba de vacaciones en Villa la Angostura.
El gobernador tiene dos problemas que debe resolver con el gobierno central: por un lado, la aprobación de los planes presentados por petroleras que buscan acceder al subsidio a la producción de shale gas de Vaca Muerta; por el otro la necesidad de una solución para el impacto negativo de las retenciones en el precio interno del petróleo.
Se trata de dos temas cruciales para la economía neuquina, ya que de ellos depende el nivel de las inversiones y las regalías que recibirá Neuquén durante 2019.
Como si esto fuera poco, la semana pasada, el diario La Nación publicó que el Poder Ejecutivo reduciría los subsidios que reciben las operadoras, calculado para este año en 2464 millones de dólares; al mismo tiempo, el diario Río Negro informó que el Gobierno estudia los alcances de una nueva adenda al convenio colectivo de trabajo. Como escribió Sebastián Premici en su nota Consumir la “Vaca Muerta” lo más rápido posible, “las dos informaciones deberían leerse como parte del mismo combo: para no resignar rentabilidad, las operadoras exigirán una mayor flexibilización laboral”.
En este contexto, las consecuencias negativas en materia ambiental del derrame en Bandurria Sur dejaron de ser un tema que preocupe al gobierno neuquino, que dejó de hablar del tema.
Cuando la respuesta del Estado es la palabra de la empresa
En octubre de 2018, quien impulsó desde la Legislatura neuquina el pedido de informes sobre el derrame en Vaca Muerta, fue el diputado provincial Santiago Nogueira.
En declaraciones radiales, el legislador contó que finalmente la Subsecretaria de Ambiente respondió al pedido de la Cámara de Diputados. “Lamentablemente lo que respondieron en cuanto a la caracterización del daño ambiental que se produjo en Bandurria del Sur (Vaca Muerta) no es ni más ni menos que lo que declaró la misma empresa. La subsecretaria solo está reproduciendo las versiones de la empresa, que es la responsable del derrame”.
Además, según expresó Nogueira, el estado provincial ni siquiera certificó si efectivamente el daño ambiental informado por la empresa se corresponde con la realidad.
“Después de tanto tiempo llama la atención que no se haya indagado cuál fue la causa que produjo ese incidente, ese descontrol del pozo ¿qué lo produjo?” agregó el diputado de Libres del Sur en Neuquén.
En sintonía con lo publicado por Agencia Cadena del Sur días atrás, Nogueira asocia la falta de controles y de información a la búsqueda de reducir costos por parte de las empresas.
“Queremos que se investigue a fondo, creemos que esto está asociado a una carrera acelerada por reducir costos en la actividad. Se está buscando reducir los tiempos en los cuales llevan adelante las operaciones como las perforaciones poniendo en riesgo a los trabajadores, al ambiente y a la comunidad” expresó.
En este sentido, el legislador cree que la Subsecretaría de Ambiente no se ha dedicado a investigar las causas del derrame y pretende que se haga cargo el área de hidrocarburos de la provincia de Neuquén del tema. Mientras tanto, las preguntas siguen sin respuestas.