«La persecución contra Cristina es un ataque contra la democracia»

El Frente Patria Grande emitió un comunicado en la tarde del miércoles en el que se expresa respecto del debate en torno a la corrupción. Allí, enfatizan que «si bien el fenómeno de la corrupción no es exclusivo de la gestión pública, sino que de hecho tiene su génesis en la actividad privada, somos conscientes de que es un problema estructural de los Estados, no solo de nuestra región, sino de todo el mundo».

Asimismo, agregan que «no se trata de una problemática nueva, sino que se ha impuesto en las agendas públicas en las últimas décadas, a partir de las políticas de las instituciones financieras internacionales».

En tanto, rechazaron «la criminalización de Cristina Fernández» y subrayaron que «la persecución» contra la senadora peronista «está orientada centralmente a su proscripción, tal como sucedió con Lula en Brasil».

El comunicado completo

A los compañeros y compañeras del campo popular:

Las y los referentes del Frente Patria Grande queremos sentar nuestra posición sobre el debate acontecido en los últimos días respecto de los hechos de corrupción y su impacto sobre la política.

  • Si bien el fenómeno de la corrupción no es exclusivo de la gestión pública, sino que de hecho tiene su génesis en la actividad privada, somos conscientes de que es un problema estructural de los Estados, no solo de nuestra región, sino de todo el mundo. A la vez, no se trata de una problemática nueva, sino que se ha impuesto en las agendas públicas en las últimas décadas, a partir de las políticas de las instituciones financieras internacionales.

Dicho esto, estamos convencidos que los actos de corrupción causan un enorme daño a los gobiernos populares o progresistas, que representan a las grandes mayorías históricamente excluidas o marginadas, y cuyo discurso promueve explícitamente la lucha contra la pobreza y la desigualdad como ejes centrales de la práctica de gobierno.

Nuestra posición es de absoluto rechazo a esas práctica, dañinas de cualquier proyecto popular y transformador. Más aún, consideramos necesario debatir este tema, buscar colectivamente modos de prevención eficaces y propuestas para una ética de gobierno capaz de recuperar la confianza de amplias porciones de nuestra sociedad. De otro modo corremos el riesgo de permitir que se instale a las derechas como adalides en la lucha contra la corrupción, cuando justamente sus gobiernos son quienes históricamente siempre se aprovecharon de los bienes del Estado en beneficio de una minoría. Por eso, quienes rechazan violentamente cualquier crítica o reflexión al respecto flaco favor le hacen al campo nacional y popular.

Todas y todos los que integramos el FPG hemos sostenido en los últimos años las defensas de muchos compañeros y compañeras que están siendo perseguidos y encarcelados como parte de esta nueva modalidad de intervención político-judicial. Y lo seguiremos haciendo.

Destacamos particularmente la criminalización de Cristina Fernández, en razón de su singular liderazgo y de que dicha persecución está orientada centralmente a su proscripción, tal como sucedió con Lula en Brasil. La persecución contra ella es, en las condiciones actuales, un ataque contra la democracia