El diario La Nación publicó hoy una editorial en la que celebra los partos de las niñas violadas. En la nota titulada “Niñas madres con mayúsculas”, se narrá la historias de dos niñas que fueron mamás y hace hincapié en el “instinto de madre, lo que le nace de sus ovarios casi infantiles”.
“Mucho más allá de la forma en que se gestaron los embarazos, claramente nada deseada ni deseable, y recordándonos todo aquello que se ha predicado con justeza sobre la necesidad de una educación sexual preventiva que contemple información sobre el propio cuerpo, resulta admirable y emocionante ver desplegarse el instinto materno”, sostiene el diario desconociendo el artículo 86 del Código Penal que data de 1921.
“Admiración hacia las niñas madres, madrazas por cierto. Tristeza para las «abuelas abortistas» que felizmente no lograron su criminal propósito. Bienvenida a los felices niños de ambas mamás y un mensaje claro y esperanzador a la sociedad para que haga lo que tiene que hacer sobre educación sexual, primero, y sobre apoyo a las mamás, después, tanto si sus embarazos fueron deseados como si fueron causados por una violación, por ignorancia o estado de necesidad. Nada importó a estas mamás niñas, salvo conservar a sus hijos”, argumenta.
La editorial hace apología de estos embarazos no deseados, en la mayoría de los casos productos de violación. “Mucho más allá de la forma en que se gestaron los embarazos, claramente nada deseada ni deseable, y recordándonos todo aquello que se ha predicado con justeza sobre la necesidad de una educación sexual preventiva que contemple información sobre el propio cuerpo, resulta admirable y emocionante ver desplegarse el instinto materno. Encarnado, corporizado, ese instinto vital de preservación arrasa con todo lo que se ha dicho y escrito desde una teoría reñida con el derecho a la vida. Despedaza el pañuelo verde, al error inducido del «yo decido sobre mi cuerpo», al feto como desprovisto de vida, entre otras denominaciones eufemísticas creadas para bajar la carga emocional que encierra decir que hablamos de un hijo desde el minuto de la concepción, de un bebé por nacer que se desea eliminar asesinándolo”, sostiene.
Falacia 1. “sostiene el diario desconociendo el artículo 86 del Código Penal que data de 1921.” No lo desconoce, ese artículo tipifica al aborto como delito y establece los casos en los cuales no será punible, lo cual para nada significa que deba aplicarse. Sino que, si se hubiera decidido por esa opción criminal, la justicia no habría impuesto pena.
Falacia 2. “La editorial hace apología de estos embarazos no deseados” No, la editorial hace apología de los embarazos deseados, el proceso de gestación, el desarrollo del hijo que culmina en el parto, eso fue lo que las niñas desearon, ““Mucho más allá de la forma en que se gestaron los embarazos, claramente nada deseada ni deseable”.
En suma, si García no tiene comprensión lectora para distinguir eso, que se abstenga de escribir. Si no tiene honestidad para argumentar sin incurrir en falacias, que se abstenga de escribir. Y si tiene honestidad y razones, que las exponga sin distorsionar lo que otros han dicho. Sería una sana contribución a un debate serio.