El Ejército de Bolivia emitió una circular para identificar y vigilar a los miembros de las fuerzas armadas que sean de pueblos originarios. Además, ordenaron el “control de los celulares” para evitar las “filmaciones de todas las actividades militares e instruyeron a identificar a “personal extranjero que realice actividades clandestinas”.
En una circular del 15 de noviembre firmada por el general José Luis Salazar Escobar, comandante de la Octava División del Ejército de Bolivia en Santa Cruz de la Sierra, se instruye a la vigilancia de los de “cadetes, alumnos y soldados originarios de la región de Chapare” para “observarlos de manera continua”. “Los mismos deben ser mantenidos en constante observación en todas las actividades que se desarrollan dentro de cada unidad”, instruye el radiograma.
Además, indican el “control de celulares” para evitar que se difundan la violencia contra los manifestantes.
Hasta el momento, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos contabilizó 23 personas asesinadas en manos del Ejército y la Policía.
Por último, el comunicado instrute a la “captura e interrogatorio de personal extranjero que realiza actividades clandestinas alrededor de las unidades”. No se especifica cuáles son esas actividades por lo que cualquier extranjero que esté cerca de los puestos militares puede ser considerado un sospechoso a detener e interrogar.