El choripan imposible

Un informe elaborado por el Centro de Economía Política Argentina (CEPA) hizo un relevamiento acerca de la evolución del precio minorista de productos básicos. Dentro de los mayores aumentos de alimentos del mes destacan el pollo entero con menudos (35,7%), el tomate redondo (22%), la leche fluida en sachet, (15,4%) y el asado novillito (2,6%). 

Cabe destacar, que estos incrementos vienen operando desde hace varios meses y paralelamente a la caída en el consumo en estos rubros, donde el pollo entero con menudos lo hizo 33,9% desde enero de 2019, el asado de novillo 25,1%, el vació 11,9%  y los huevos blancos 17,5%. En el caso de la leche fluida, la falta de oferta en las marcas incluidas en precios cuidados sumado a la desaparición de la marca SanCor hacen incrementar aún más el precio al consumidor, ya que en muchos comercios solo la leche de primera marca La Serenísima está disponible.

Considerando los aumentos de alimentos desde octubre de 2015 se destacan especialmente el chorizo parrillero (663,4%), el aceite de girasol (463,2%), huevos blancos (381,8%) y la cerveza de litro (360,3%).

Del relevamiento de precios realizado surge que el costo de la canasta básica alimentaria para una familia tipo asciende a $12.575, monto superior al salario mínimo vital y móvil ($12.500), necesario para cubrir las necesidades nutricionales mínimas sin incluir otros gastos imprescindibles de vivienda ni de transporte. Desde octubre de 2015 la Canasta alimentaria se incrementó 296,6% y entre marzo de 2018 y marzo de 2019 76,2%. Solamente en el mes de marzo de 2018 el incremento fue de 6,1%.

Considerando el monto del salario mínimo vital y móvil a octubre de 2015, el mismo debería alcanzar en marzo de 2019 $22.162 para mantener el poder de compra respecto de la canasta básica alimentaria. De la misma manera, si se considera la jubilación mínima a octubre de 2015, la misma debería alcanzar un monto de $17.050 en marzo de 2019 para equiparar los incrementos de la canasta alimentaria en el período.

Se necesitan $12.574 de incremento en el SMVM para mantener el poder adquisitivo respecto de la canasta básica y $12.751 en las jubilaciones.

La falta de control sobre el programa de “Precios Cuidados” hace que desaparezcan precios de referencia, y profundizan los aumentos, principalmente en el caso de la leche fluida, las gaseosas cola y la yerba mate.

Respecto a los productos de aseo y limpieza, destaca el incremento de la lavandina con subas promedio de 12,4%, mientras que la pasta dental avanzó 11,3%, el papel higiénico, se mantuvo estable, con una insignificante baja de $0,06, requiriendo más de $90 para la obtención de 4 rollos de este producto de primerísima necesidad para la higiene de las personas.

El aumento de precios de los productos básicos resulta especialmente pernicioso cuando se considera la evolución de los salarios de los sectores de menores ingresos, ya que los mismos gastan una mayor proporción de su salario en productos de primera necesidad. El gasto en estos productos, sumado a las de tarifas, transportes y alquileres dejan muy poco margen para que un hogar pueda realizar otro tipo de consumo(al cuarto trimestre de 2018 el ingreso per cápita del hogar del 50% de la población era inferior $7.600).