El presidente del Brasil, Jair Bolsonaro, ordenó este martes realizar «las conmemoraciones debidas» en los cuarteles para celebrar los 55 años del inicio del Golpe Militar. «Nuestro Presidente determinó que el ministerio de Defensa realice las conmemoraciones debidas relacionadas con el 31 de marzo de 1964, incluyendo [la lectura de] un orden del día patrocinado por el ministerio de Defensa», informó el vocero del Gobierno, Otávio Rego Barros.
El funcionario comunicó que las actividades estarán reguladas por «quello que los comandantes consideren dentro de sus respectivas guarniciones, y dentro del contexto en que deban realizarse».
Para Bolsonaro, que tiene un pasado como capitán del Ejército, el derrocamiento del expresidente Joao Goulart no fue un Golpe de Estado, sino un movimiento «de civiles y militares» que «permitió derrotar a las guerrillas de izquierda e impidió la instalación de un régimen comunista».
Al respecto, el vocero gubernamental amplió esa idea y comentó que «el Presidente no considera el 31 de marzo de 1964 un golpe militar. Considera que la sociedad reunida, percibiendo el peligro que el país estaba viviendo consiguió recuperar y devolver a nuestro país el rumbo». «Si eso no hubiese ocurrido, hoy tendríamos aquí algún tipo de gobierno que no sería bueno para nadie», completó.
