El exministro de Trabajo entre 2003 y 2015, exembajador de México. Cuestionó la gestión de Javier Milei y su plan para legalizar el trabajo informal sin ampliar ni mejorar las condiciones laborales. Aseguró que la reforma regulatoria que plantea el Gobierno para el mundo del empleo no solo no resuelve ninguno de los problemas del sector o de la economía, sino que los agrava. Advirtió que Milei «tiene un problema con la democracia» y afirmó que entre los vetos y los DNU «está al límite» de la Constitución. En dialogó con #LaGarcía en los estudios de la Am750.
“Creo que ni siquiera termina de atender demasiado a su sueño húmedo, porque al mismo tiempo es muy berreta», se indignó Tomada, quien afirmó que la reforma «legaliza la informalidad, lo que antes era fraude laboral, lo que vos antes podrías reclamar, ahora está permitido”.
Y, como contracara de esta reforma, está el aparato represivo: “Si hay alguien que ha fortalecido es el esquema represivo del Estado, con dichos, amenazas, agresiones, exhibiendo la compra de armamento como si fuera algo digno de mostrarse”. Y afirmó que “Está teniendo un impacto. El tema de cómo reprimen está muy penado. Esta cuestión de salir de cacería cuando terminan las movilizaciones. Te fajan igual aunque seas prensa. Es muy grave. Están dejando señales para generar miedo”. .
El plan de Milei se para en la vereda de enfrente a la democracia: “Creo que estamos entrando en una nueva etapa. Creo que el veto y el esquema de DNU no puede ser el sistema de Gobierno. Está en los límites de la democracia”. Y afirmo “Y si esto lo ejecuta un tipo que dice que Argentina no se recupera por los últimos 100 años, yo tengo todo el derecho a sospechar que este tipo tiene un problema con la democracia”.
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