El Tribunal Supremo Electoral ratificó este jueves la victoria en primera vuelta de Evo Morales en las elecciones presidenciales de Bolivia. Los datos oficializados arrojan una ventaja de 10,55 puntos para el actual presidente, que obtuvo el 47,07% frente al 36,52% del opositor Carlos Mesa.
Esta mañana, el reelecto mandatario celebró como «una buena noticia» su victoria, en tanto que su contrincante calificó los resultados como un «fraude escandaloso». En este marco, Morales denunció que «está en proceso un Golpe de Estado» orquestado por la derecha internacional.
De hecho, tanto la OEA como la Unión Europea instaron a que se convoque a una segunda vuelta, pese a que la diferencia de más de 10 puntos avala la victoria de Evo. «En el caso de que, concluido el cómputo, el margen de diferencia sea superior al 10%, estadísticamente es razonable concluir que será por un porcentaje ínfimo. Debido al contexto y las problemáticas evidenciadas en este proceso electoral, continuaría siendo una mejor opción convocar a una segunda vuelta», dijo Gerardo de Icaza, veedor de la Organización de Estados Americanos en Bolivia.
Por su parte, desde la UE emitieron un comunicado en el que «comparten plenamente» la sugerencia de la OEA. «Las autoridades bolivianas deberían concluir el proceso de conteo en curso, y que la mejor opción sería realizar una segunda vuelta para restablecer la confianza y asegurar el respeto pleno de la elección democrática del pueblo boliviano», sostuvieron en un documento firmado por el Servicio Europeo de Acción Exterior.
