Assange y el fin del periodismo

Carlos Poveda, abogado de Julian Assange en territorio ecuatoriano, criticó duramente a Lenín Moreno por haber terminado el asilo político del fundador de Wikileaks y denunció que su detención fue “totalmente inhumana, degradante y cruel”. Además, sostuvo que el arresto fue parte de un acuerdo entre “EEUU, Gran Bretaña y Ecuador”. “Esperamos que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos nos otorgue una medida cautelar porque esta situación ya es irracional, injusta y antijurídica”, reclamó en declaraciones al programa #Tranqui120 que se emite en Radio Estación Sur FM91.7.

El representante legal del activista señaló que “la palabra del Gobierno ecuatoriano ya no goza de credibilidad” y desmintió varias argumentaciones expresadas por Lenín Moreno y su canciller, José Valencia: “Decían que no había ninguna investigación de Estados Unidos y hace dos meses exactamente se inició una cooperación de Ecuador con EEUU para investigar a Assange; decían que iba a ser arrestado por la falta de comparecencia en Gran Bretaña y fue arrestado por la orden de extradición de EEUU; decían que era un rumor falso que iban a terminar con el asilo, y no fue así”, enumeró.

“Hubo acuerdos entre EEUU, Gran Bretaña y Ecuador, aunque se jacten de que fue una ‘decisión soberana’, porque da la casualidad de que suspendieron el asilo, se activó la orden de extradición y automáticamente la policía británica ingresó para sacarlo por la fuerza”, remarcó.

En este sentido, recordó que el diario New York Times expuso que el reciente acuerdo firmado entre el Fondo Monetario Internacional y Ecuador habría estado supeditado a la entrega de Assange por parte de las autoridades ecuatorianas. “Hay una conversación que podría salir en los próximos días en donde se evidencia que se vendió la cabeza de Assange”, informó.

Por otra parte, Poveda indicó que “en Madrid se están investigando supuestos actos de filtración de datos de la vida privada del Sr. Assange” y comentó que “se han identificados documentos que tenían reserva legal, inclusive documentos con información del equipo legal internacional y del equipo médico”. “Se sospecha que Assange estaba siendo vigilado las 24 horas: el personal del Sr. Assange recibió agresiones físicas y se abría la puerta invitando a la Policía a ingresar para que se lo detenga. Todo eso fue denunciado ante el relator para derecho de la privacidad de las personas de la ONU”, subrayó.

El abogado ecuatoriano también se refirió a los gastos informados por las autoridades gubernamentales sobre el costo del asilo del fundador de Wikileaks y los vinculó a las denuncias de espionaje: “Si han invertido tanto, no ha sido para cuidarlo, sino para espiarlo y después tratar de vender la información”, retrucó. En este marco, precisó que “hay una investigación sobre los actos de espionaje que ha realizado el Gobierno de Ecuador, inclusive salió en un diario londinense que se habían ofrecido vídeos completos de situaciones de carácter reservado del Sr. Assange y quisieron extorsionar por 3 millones de euros con información de Assange en medios españoles”.