*Por Sebastián Premici para Agencia Cadena del Sur
Ya se perdieron 15.002 empleos entre el primer trimestre de 2016 y el mismo período de 2018, según datos oficiales.
Pasó el G-20 por Buenos Aires. Disipada la espuma vuelven a verse los despojos de la Alianza Cambiemos sobe la Argentina. La destrucción de puestos de trabajo productivos (industriales sobre todo) no es un daño colateral sino eje central del disciplinamiento social. Entre el primer trimestre de 2016 y el mismo período de 2018, se destruyeron en la Patagonia 15.002 empleos. Este dato surge del Observatorio de Empleo y Dinámica Empresarial en base al SIPA elaborado por la devaluada cartera laboral que conducía hasta hace algunas horas Jorge Triaca.
El siguiente informe es un trabajo conjunto entre Agencia Cadena del Sur y el Observatorio de Economía Política del Centro Cultural de la Cooperación.
La Patagonia es una de las regiones más castigadas por las decisiones de política económica de la Alianza Cambiemos. La liberación del precio del barril de petróleo, la flexibilización laboral en el sector de los hidrocarburos, la parálisis total de obras energéticas, la apertura importadora de alimentos y de tecnología sumada a una deliberada política de retracción del consumo generó un solo resultado: la masiva destrucción de puestos de trabajo productivos.
Hidrocarburos
Lo que sucede en el sector petrolero es emblemático, no sólo por la pérdida de puestos de trabajo sino porque a raíz de esta política flexibilizadora, YPF degradó sus controles de seguridad lo que ocasionó serios derrames, el último de ellos en Río Negro.
En Vaca Muerta, donde ocurrió el primer derrame fuerte de YPF-, el Gobierno consiguió junto a la venia del senador y representante sindical Guillermo Pereyra una adenda al Convenio Colectivo del Trabajo del sector, que en la práctica consolidó una política de disciplinamiento social a través de las amenazas de despidos.
El presidente de la Nación, Mauricio Macri, repitió en dos oportunidades que en Vaca Muerta se generarían “500.000 puestos de trabajo directos”. Al primer trimestre de 2018 (último dato desagregado informado por la devaluada cartera laboral), en Neuquén había 19.373 puestos de trabajo registrados en el sector de los hidrocarburos, muy lejos de lo que pretende el Presidente. Es más, entre el primer trimestre de este año comparado con el mismo período de 2016, la destrucción de puestos de trabajo en este sector ascendió a 1635 casos.
En el período analizado, la destrucción de empleos asalariados en el sector alcanzó, para toda la Patagonia, los 6683 casos, discriminados de la siguiente manera: Chubut (-2055), Neuquén (-1635), Río Negro (-519) y Santa Cruz (-2501).
Industria devaluada
En Tierra del Fuego, provincia cuyo eje económico pasa por la industria manufacturera, fue una de las primeras jurisdicciones en sufrir la apertura indiscriminada de las importaciones (al bajar aranceles) sobre los mismos productos que se fabricaban o ensamblaban en la isla. Entre el 4° trimestre de 2015 y los primeros tres meses de la gestión macrista, en la provincia se destruyeron 3323 puestos de trabajo directos, al pasar de contabilizarse 16.676 empleos registrados a 13.353. Y ese fue sólo el comienzo. Entre el primer trimestre de 2016 y el mismo período de este año, se perdieron otros 1169empleos registrados.
En total, en el período analizado (1° trimestre 2016-2018) la pérdida de empleo asalariado registrado en este sector fue de 3040 casos, discriminados de la siguiente manera: Neuquén (-873), Río Negro (-224), Chubut (-617), Santa Cruz (-157) y Tierra del Fuego (-1169).
Frutas importadas
En 2015, las compras de manzanas desde el exterior totalizaron las 113 toneladas. Durante el primer año de la gestión Cambiemos se registró un abismal incremento del 2547 por ciento, al importarse 2992 toneladas. El año pasado, las importaciones totalizaron las 1089 toneladas solamente entre enero y mayo, un 863 por ciento más que en 2015, aunque este dato es parcial ya que el Senasa(organismo público nacional que elaboró estas cifras de importaciones) informó que hubo una modificación en el sistema de registración y sólo publicó los datos de las importaciones hasta ese mes. Para 2018 no informó cifras de importaciones de productos vegetales.
Entre el primer trimestre de 2016 y el mismo período de este año, el nivel de asalariados registrados en el Alto Valle de Río Negro descendió en 1622 puestos. En toda la Patagonia, la destrucción de puestos para este sector fue de 1930 casos.
Construcción
Durante el primer año y medio de la gestión Cambiemos se destruyeron 5350puestos en las cinco provincias de la Patagonia. Luego hubo una incipiente recuperación, traccionada por los recursos volcados por Nación para las elecciones de medio término, pero siempre con números negativos en el saldo total.
Con los sucesivos ajustes fiscales anunciados desde abril de este año como consecuencia del acuerdo con el FMI, con recortes explícitos en obra pública, el Gobierno volvió a agudizar la situación en este sector. Según el Instituto de Estadística y Registro de la Industria de la Construcción (Ieric), en julio de 2018 se produjeron varias caídas interanuales en la contratación de mano de obra asalariada: Chubut (-26,6%), Río Negro (-7,3) y Santa Cruz (-15,1). En total, serían 2783 puestos menos que en julio de 2017 para estas tres jurisdicciones.
Otros rubros
Los altos niveles de inflación, tarifazo de por medio, y los pocos incentivos al consumo quebraron uno de los círculos virtuosos de la economía. En el sector “Comercio al por menor”, las pérdidas de puestos de trabajo asalariados registradas en el primer trimestre de 2018 en comparación con el mismo período de 2016 asciende a 1343 casos.
Por otro lado, los “Servicios inmobiliarios, empresariales y de alquiler”, que de alguna manera son un reflejo de la actividad económica en general (estudios contables, renta de locales, asesorías, etc), registró una destrucción de 4211 puestos de trabajo en las distintas provincias de la región.
