Pepe Mujica: un hombre de la revolución

En una entrevista exclusiva con #LaGarcía, el expresidente de Uruguay José “Pepe” Mujica habló de la América Latina, la revolución, la iglesia y la muerte.

Con respecto a sus declaraciones sobre tomarse “una licencia antes de morir”, Pepe sostuvo que “la vida es tan hermosa, a pesar de los pesares, porque paradójicamente existe la muerte”. “Las cosas vivas están hechas para luchar por la vida y por vivir, una lucha que es imposible. Tal vez por eso la naturaleza inventó el amor que es una forma de luchar contra la muerte”, agregó.

Mujica también se refirió a la discusión sobre separar el Estado de la Iglesia en Argentina y dijo que “el Estado tiene que ser independiente”.

“Debemos ser el país más laico de América Latina, eso nos ha dado comodidad. Yo políticamente soy muy amigo de la iglesia católica y no soy creyente. Pero como soy muy latinoamericanista… En América Latina hay dos ejes: la lengua y la tradición de la iglesia católica, por eso le doy importancia política. Creo que la religión debe estar aparte del Estado, el Estado tiene que ser independiente, laico”, sostuvo.

También se refirió a la situación política en América Latina y dijo que la región “está pulverizada”. “Tenemos muchas dificultades, alguna gente va a pensar que es culpa de la derecha… Es culpa de una especie de sumisión de carácter intelectual en la cual nos tocó surgir”, sostuvo.

“Tenemos una mirada hacia el mundo central, hacia Europa, hacia Estados Unidos y muy poco entre nosotros. La integración necesita voluntad política y ser una construcción. Hay una falla que no hemos logrado que es que el fenómeno de la integración sea un fenómeno popular, no tiene masa. Tiene gente intelectualizada, que lee dos diarios por día pero no verás una marcha por Avenida de Mayo por la integración”, agregó.

Además sostuvo que la integración tiene varias aristas: “la integración no es solo un fenómeno económico, es cultural también, Si no se incorpora la inteligencia…hay que integrar a las universidades”. “La batalla es terriblemente cultural, es más fácil cambiar una realidad material que una realidad cultural”, afirmó.

Por último, Mujica hizo una análisis sobre la sociedad de consumo que impone el capitalismo y dijo que “es una trampa cultural que tiene un eje que se llama ´políticas de marketing´ que de la mañana a la noche nos bombardean y que les da resultado. Tienen más fuerza que un ejército porque eso gobierna nuestras reacciones naturales en el seno de nuestra casa”

“Todas las revoluciones se pierden. Las revoluciones terminan siendo actos civilizatorios, nunca triunfan en línea recta pero dejan una cantidad de cosas inconmovibles que se incorporan a la vida humana”, agregó


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